En las siguientes líneas te vamos a ofrecer una serie de consejos para darle una mayor calidez a la decoración de invierno de tu hogar y volverlo aún más acogedor.
Y es que estamos en pleno invierno, las temperaturas se han desplomado, las lluvias y las nieves arrecian, y es normal que muchos solo tengamos ganas de quedarnos en casa recostados en el sofá y escondidos bajo una manta.
Una buena dosis de vitaminas
Evita los azules clásicos del invierno inyectando en tu hogar una buena dosis de colores vitaminados que animarán los espacios con su energía. Un tapete de lana, cojines decorativos, una lámpara de mesa o incluso velas de colores te ayudarán a darle un toque cálido a las estancias de tu casa. Como vemos con pequeños pinceladas podemos conseguir grande cosas.
Además estos colores animados también son ideales para la llegada de las estaciones cálidas, como son la primavera y el verano. Así que tienes un efecto adicional, ya que puedes mantener los accesorios que coloques en invierno en los meses siguientes, y así rentabilizarás tu inversión.
Maximiza la luz
Con los días que cada vez son más cortos es importante maximizar al máximo la luz del día. De hecho, esto se convierte en un punto esencial. Para ello opta por cortinas dobles e independientes, con tejidos ligeros como el lino o el algodón que permiten entrar la luz del sol y su calor durante el día, y cortinas de materiales más gruesos como el terciopelo o el ante para conservar ese calor acumulado por las noches.
Haz que los reflejos del sol iluminen y calienten todos los rincones de las piezas. ¿Cómo hacerlo? Por ejemplo puedes colocar espejos en la habitación para que la luz solar salga reflejada a cada metro cuadrado del espacio.
Y ya que hablamos de luz, no dudes en multiplicar los puntos de luz durante este período. Éstos iluminarán los espacios a la vez que aportarán una mayor calidez. También puedes jugar con el material de las pantallas de las lámparas. Materiales como el ante, el cuero o el terciopelo mejorarán el efecto caluroso que buscamos.
Fragancias calurosas
Una parte esencial de un ambiente acogedor y cálido son las fragancias que se propaguen por el aire. Y es que los efectos de la aromaterapia son más determinantes de lo que a priori podríamos pensar. Pero cuidado con la forma de aplicarlas, porque en forma de aerosol el efecto es nulo. Éstas deben aplicarse en sutiles notas aromáticas mediante velas perfumadas con aromas de canela, abeto o bayas de invierno.
Combina alfombras
Para quitar el frío del suelo está claro que las alfombras son una solución excelente. Pero, ¿quieres hacer que éstas sean aún más cómodas este invierno? ¡Atrévete a superponerlas! Sobre una gran alfombra puedes colocar otro modelo más pequeño y acogedor para los pies, para añadir así textura y calidez a la habitación. Si buscas alfombras, tanto grandes como pequeñas, en SofaClub tienes creaciones indispensables.
Haz entrar el calor con mantas y cojines
Recubre tus sofás y sillones con estos elementos. ¡Nada mejor para calentar el salón y a ti mismo! En el mercado hay cada vez más mantas polares con un peso ínfimo y que ofrecen un calor excepcional.
Igualmente puedes jugar con los cojines. Juega con la acumulación de éstos en los sofás y los sillones del salón y crea un efecto confortable y acogedor. Para darle aún más estilo al espacio puedes colocar incluso un puf del mismo material de los cojines.