Los espacios de los que disponemos en casa cada vez son más pequeños y ajustados. Y una de las piezas que más lo ha notado es la cocina. Cada vez es más frecuente encontrar cocinas abiertas al salón.
Estas cocinas dan una mayor sensación de amplitud y de iluminación a espacios reducidos, aunque traen otro tipo de inconvenientes como olores o falta de armonía. Vamos a mostrarte las características de las cocinas americanas y a ayudarte a potenciar sus virtudes.
Las ventajas de las cocinas americanas son muchas: una mayor sensación de espacio agrandando el espacio disponible, la posibilidad de cocinar y estar más cerca de la familia o de los amigos que están en el comedor, poder vigilar la preparación de la comida mientras realizas otra actividad, mayor modernidad y originalidad en el interior del hogar, etc.
Pero también encontramos desventajas como el ruido de los electrodomésticos que se oyen mientras estás en el salón, los olores de los alimentos y de la preparación de los mismos, la necesidad de que la decoración de la cocina armonice con los elementos del comedor, etc.
No te preocupes porque estos inconvenientes pueden reducirse y a continuación voy a intentar mostrarte cómo con una serie de consejos.
Elige una campana potente y unos electrodomésticos silenciosos. En una cocina office la campana extractora es indispensable para aspirar el aire cargado y los olores. Ésta debe ser capaz de renovar 10 o 12 veces el volumen de aire cada hora.
Para que la campana sea realmente efectiva debes encenderla cinco minutos antes de cocinar y apagarla diez minutos después. Los electrodomésticos silenciosos te serán muy útiles para que sus ruidos no interfieran en tu vida diaria.
El material de los muebles de fácil mantenimiento. Al estar la cocina integrada con el salón, debemos intentar que esta primera esté lo más limpia posible. Lo mejor para conseguirlo es utilizar materiales poco sensibles al agua y a las manchas, y que se limpien fácilmente.
Laminado, madera, cristal para los muebles y superficies de trabajo, gres cerámico o revestimientos plásticos para los suelos son excelentes elecciones.
Cuida la iluminación. Una cocina americana debe tener una iluminación general que no “aplaste” a la de las habitaciones contiguas, ni que tampoco sea más oscura que éstas. Esta armonía le dará amplitud y serenidad a la estancia.
Piensa en la seguridad de los niños. Si de normal es imposible impedir que los niños se acerquen a la cocina, en una cocina office ese problema se multiplica por 3.
Por ello debes multiplicar las precauciones: elige hornos con puerta de seguridad o de apertura superior, lavavajillas con los botones escondidos, coloca tacos de bloqueo en los cajones y en los muebles en los que guardes utensilios de cocina, cuidado con las cacerolas calientes, etc.