Los miembros del estudio Loos tienen toda mi admiración a partir de este mismo momento. Yo que era una fanática de los Lego he visto que mi sueño de niña se puede hacer realidad. Yo siempre pensaba al hacer alguna construcción que algún día, si compraba un montón de piezas, podría hacer mi propia casa con bloques de Lego. Y este estudio lo ha hecho realidad.
La casa en cuestión es un pabellón temporal realizado para el festival de Grenswerk en la ciudad de Enschede (Holanda). El pabellón era un punto de encuentro y un lugar especial en el que se realizarían espectáculos y exposiciones. Por ello los organizadores buscaban un edificio remarcable. Y el estudio Loos lo construyó. Vaya si lo construyó.
El edificio es una gran nave en forma de iglesia con un campanario de 20 metros de altura. La parte baja del edificio está creada con grandes piezas que imitan el diseño de los bloques de lego. Lo que pretendían con la elección del material era reflejar lo fácil que es construir con estos bloques y demostrar lo reutilizable del material, ya que es fácilmente desmontable.
Me gusta mucho este pabellón ya no solo por la forma en la que está construido, sino por la sensacional relación que se ha creado entre algo grande y abrumador como es la iglesia, con algo tan divertido y sencillo como son los Lego.