Son muchas las personas que se decantan por pedir un préstamo o un crédito para poder hacer frente al gasto que supone realizar una reforma en una vivienda, porque no nos alcanza con el sueldo que cobramos. Los créditos personales ofrecen la ventaja de que puedes conseguir dinero urgente por una vía rápida y sencilla que podrás devolver en el plazo que estipules con la entidad.

Eso sí, a la hora de pedir un crédito es necesario tener algunos puntos claros, como es el caso de saber a qué entidad de créditos acudiremos o el tipo de documentación y requisitos que nos exigirán cumplir. Por eso y, para que puedas realizar una mejor decisión, en este artículo te detallamos los puntos clave que deberás tener en consideración antes de pedir tu crédito.

Cantidad de dinero que queremos solicitar

Por supuesto, uno de los primeros aspectos que tenemos que tener claros a la hora de solicitar un crédito personal es el dinero que necesitaremos para realizar nuestro proyecto de reforma. El punto más importante es tener claro que nunca deberemos solicitar más dinero del que realmente necesitemos, ya que hay que tener en cuenta que toda cantidad que solicitemos deberá ser devuelta junto a los intereses que vaya generando con el paso del tiempo, por lo que, a más cantidad de dinero, mayor serán los intereses que tendremos que devolver y más caro nos saldrá el crédito.

Además, pedir más dinero del que realmente se necesita puede acabar resultando en un sobreendeudamiento, haciendo que necesitásemos solicitar nuevos créditos o préstamos para deshacernos de las deudas contraídas.

Estudiar el tipo de interés que nos ofrece la entidad

El análisis del tipo de interés al que la entidad ofrece el crédito resultará fundamental, ya que las condiciones variarán dependiendo de si se trata de un tipo de interés fijo o variable. Los primeros, los de tipo fijo, ofrecen la ventaja de tener la seguridad que siempre pagaremos la misma cantidad y los variables, como su nombre indica, podrán ir cambiando en función de un indicador que cambiará en función de cómo se vaya modificando.

Requisitos de solvencia

La solvencia será lo que garantizará a la entidad prestamista que podremos devolver el crédito que estamos solicitando. Muchas entidades de créditos personales, como es el caso de este portal especializado, solicitan que tengas un inmueble en propiedad, de manera que puedan realizar una tasación oficial del mismo para poder prestarte hasta el 25% del valor de mercado de la vivienda tasada en un plazo de 72 horas.

Observar el número de cuotas y cuantía de la misma

A la hora de pedir un crédito también resultará interesante que estudies cuál es tu viabilidad de tiempo a la hora de devolverlo. Piensa que, cuantas menos cuotas pagues, menor serán los intereses generados por el crédito. Una cuantía de cuota baja a la hora de la devolución del crédito no implica, necesariamente, que vayas a pagar menos en total, de hecho, es posible que acabes pagando más intereses. Por eso sería beneficioso que, antes de pedir el crédito, estudies en cuántas cuotas podrías devolverlo y que te fijes a ello.

Ser responsable con los plazos

Si en el contrato te comprometiste a devolver el crédito en un plazo determinado, lo más conveniente es que seas responsable a la hora de pagar las cuotas y de cumplir los plazos o, de lo contrario, podrían serte aplicados intereses por retraso que acabarían encareciendo de manera más que considerable tu crédito.

Leer siempre con cuidado el contrato

Deberás detenerte a leer con cuidado las cláusulas del contrato para el crédito que estás solicitando, fijándote en que aparezcan los datos más importantes, como son la cuantía total de dinero prestado, la tasa de interés, la forma de pago, las cuotas que tienes para devolver el crédito, el interés que se aplicará en caso de demora y cuáles son las consecuencias que se aplicarían por incumplimiento de contrato por alguna de las partes.