El proyecto de la casa Charred Cedar está situado en Hirosima y ha sido diseñado por el estudio Naf Architects & Design. La casa consta de tres niveles muy diferenciados. El primero incluye el vestíbulo, el dormitorio principal, una sala de relax y un baño, el segundo un mirador de 360 grados, y el tercero el salón, el comedor y la cocina.
Lo primero que sorprende en esta casa es que no tienen una entrada japonesa convencional para quitarse los zapatos. En su lugar hay un tatami que actúa como vestíbulo con un manto de arena y un suelo de ladrillo que nos muestra la escalera de caracol por la que podemos subir a los otros dos niveles.
El ladrillo y la arena ayudan a crear un aspecto semiexterior/seminterior en el espacio desde un punto de vista de la materia y de la naturaleza, llevándonos progresivamente desde el exterior a un espacio más privado.
En este espacio encontramos la habitación principal de la casa, el tatami, el cuarto de baño y la escalera en espiral que nos lleva a las plantas superiores. El hall, el tatami y la habitación principal se dividen con puertas correderas. Y lo interesante es que cuando todas éstas están abiertas, la habitación parece casi exterior.
El segundo nivel es un espacio vacío y translucido que sirve como mirador. El espacio es circular y todas las paredes son cristaleras. Esto hace que parezca que el tercer nivel nivel esté como flotando en algunas partes. Esta segunda planta, aunque parece la más accesible desde el exterior, en realidad es la pieza menos accesible de la casa.
En ese tercer nivel “flotante” encontramos el comedor y la cocina. Este espacio presenta una estructura de madera que le da un toque muy natural al conjunto, rematado perfectamente con las vigas de madera visibles. Este espacio cerrado recuerda a un pequeño nido con unas pequeñas aperturas que son las que le brindan luz del exterior.