Hoy os traigo un peculiar proyecto llevado a cabo en Finlandia por Robin Falck. En 2009 Robin se propuso realizar una construcción que no sobrepasara los 12 metros cuadrados, superficie máxima que permiten las normas finlandesas para construir sin permiso de obra. Además de una superficie límite, este ingenioso finlandés también contaba con otra limitación: el presupuesto.
Con estas dos premisas, Falck se pone a idear como será su casa. Una vez planificada y consultada con arquitectos, comienza la construcción de esta pequeña cabaña realizada en madera y materiales reciclados en pleno bosque. Y el resultado es sorprendente, ¿verdad?
Por menos de 10.000 euros Robin Falck ha sido capaz de crear un pequeño nido de algo más de 9 m2. La casa se compone de un loft de 5 metros cuadrados con salón y dormitorio muy luminoso gracias a su gran ventanal y tremendamente acogedor, y de una cómoda terraza para disfrutar de la naturaleza finlandesa.
A mí personalmente tanto la idea como el diseño me parecen innovadores y muy acertados. ¿Y a vosotros?